Cuando el ánimo decae, viajar con la mente puede ser un refugio dulce y sanador.

🕯️ Enciende tu vela Embrujos Marinos y busca un momento sin interrupciones.

🌾 Siéntate cómoda, con luz tenue y ojos cerrados.

🌬️ Imagina un paseo tranquilo junto al mar. Siente la brisa, el olor salado, el sonido de las olas.

Si puedes tener una concha o piedra que hayas recogido, será genial y te servirá para anclar mejor esa sensación.

Quédate ahí unos minutos, respirando profundo.

No necesitas estar “bien”. Solo estar.

Este viaje interior te recuerda que la calma también vive en ti.

Un gesto pequeño que, si lo repites, puede convertirse en una fuente de serenidad ✨

Cuando te sientes bajita de energía, la ternura hacia ti misma es un acto de valentía.

🕯️ Enciende tu vela Sinfonía Silvestre.

🌿 Busca una manta suave, una infusión calentita o un rincón tranquilo. Y regálate flores!!!

💌 Escribe una carta breve a ti misma: puede ser un “lo estás haciendo bien” o “me doy permiso para sentir”.

No la juzgues. No necesitas dar explicaciones.

Solo abrázate desde las palabras, aunque no sepas por dónde empezar.

Porque cuidar tu mundo interior empieza con un pequeño “sí” hacia ti 🌷

Cuando la tristeza pesa, a veces solo necesitamos sentirnos sostenidas.

🕯️ Enciende tu vela favorita de Velas Celtas.

🤲 Coloca las manos sobre el pecho y respira lento, tres veces.

🧘‍♀️ Acaricia tus brazos o tu rostro suavemente, como si cuidaras a alguien muy querido.

Repite en silencio: “Me acompaño con amor. Estoy aquí para mí.”

No necesitas cambiar cómo te sientes.

Solo ofrecerte presencia y calor, sin exigencias.

Este gesto íntimo y consciente es, en sí mismo, un acto de autocuidado profundo 💫